Los empleados de Delta, sin inmutarse por hasta 30 pulgadas de nieve que cayeron a lo largo de la costa este, se reunieron el domingo para reiniciar las operaciones de la aerolínea. Muchos se ofrecieron como voluntarios en sus días libres y acamparon en donde fuera necesario para lograr que los clientes pudieran trasladarse de nuevo.

En el Aeropuerto Internacional JFK de Nueva York, los empleados de Delta reanudaron las operaciones de vuelo en menos de 24 horas, después de 30,1 pulgadas que cubrieron el aeropuerto. El primer vuelo, a la República Dominicana, abordó justo antes de las 3 p.m. Delta también reanudó vuelos en Filadelfia el domingo por la tarde.

Incluso en los aeropuertos de Washington D.C., donde los vuelos permanecieron en tierra el domingo, los agentes de rampa de Delta en el aeropuerto internacional de Dulles se ofrecieron para ir y limpiar las rampas con 29 pulgadas de nieve para la reanudación de las operaciones anticipada para el lunes a las 9 a.m. Otros empleados fueron a trabajar para abrir el mostrador de boletos de Delta el sábado en caso de que el aeropuerto fuere capaz de abrir, dijo Alpha Toure, administrador de la estación de Delta en Dulles.

"Esto demuestra la dedicación que tienen los empleados a esta empresa y a nuestros clientes", dijo Toure el domingo. "Ha sido una aventura aquí, pero todo el mundo está de buen ánimo y tirando juntos hacia adelante. Eso es lo que hace que este equipo sea excepcional."

Stephanie Baldwin, director de Servicios en Aeropuerto en JFK, dijo que numerosos clientes la llevaron a un lado para agradecer a Delta para hacer un buen trabajo de re-acomodar a los pasajeros. Ella misma pasó parte de la mañana ayudando a los clientes detrás del mostrador de boletos.

Varios de los líderes de Delta en JFK pasaron la noche en el aeropuerto para ayudar a acelerar el reinicio de la operación de la aerolínea hoy, mientras que los equipos de deshielo trabajaron no sólo en los aviones, sino también en las rampas congeladas. “Otros empleados acamparon en donde podían”, dijo Baldwin. "Los empleados compraron ropa de bebé y leche de fórmula para unos abuelos que viajaban con su nieto bebé desde Tailandia a través de JFK a Raleigh-Durham, y se retrasaron el fin de semana", dijo Baldwin.

Para media tarde, Delta prevé una operación casi completa de la línea principal en los aeropuertos de JFK y LaGuardia, aunque la operación regional de Delta Connection ha sido cancelada por el resto del día.

En Filadelfia, las operaciones también se reinician el domingo por la tarde, en parte gracias a los empleados de mantenimiento y el equipo de tierra que trabajaron durante la noche con remolcadores cada hora para evitar que se congelen, dijo Judy McMurtry, gerente de la estación Filadelfia. Algunas pasarelas fueron incluso limpiadas con máquinas quitanieves para minimizar la tarea por parte de los contratistas que llegaron cuando la nieve comenzó a caer.

En el Aeropuerto Reagan National en Washington, los empleados pasaron el domingo preparando el reinicio anticipado para el lunes por la mañana. Los empleados mantuvieron los vuelos operando cuanto pudieron el viernes por la noche, antes de que las condiciones se volvieran inseguras.

"Mucho después de que todas las demás aerolíneas habían suspendido sus operaciones, el equipo Delta logró operar seis vuelos para llevar a nuestros clientes de forma segura en su camino", dijo Dion Moncur, gerente de la estación Reagan National. "Estoy muy orgulloso del impresionante nivel del trabajo en equipo que se mostró el viernes por Servicio al Cliente, TechOps y los empleados del equipo en tierra para mantener la operación y llevar a nuestros clientes". 

NOTA: La exención de vuelos de Delta por el clima invernal sigue vigente para permitir a sus clientes el hacer un cambio a sus itinerarios de vuelo y poder acomodarlos en otros vuelos una vez que pase la tormenta. Se le avisa a los clientes que verifiquen el estatus de sus vuelos en Delta.com o por medio de la aplicación para dispositivos móviles Fly Delta App.